ALMA DEL SEPTIMO CIELO

[RaboCalifa]

CHICA
Nombre "artístico": Alma
Nacionalidad: Española
Edad aproximada: 30
Fotos falsas o retocadas?: Muy retocadas, pero es ella.
Descripción de Cara: Rostro atractivo, con mirada intensa y labios carnosos. Muy maquillada.
Descripción de Cuerpo: Buen cuerpo, curvas marcadas, pecho operado, trasero potente. Algo más bajita de lo que aparenta.
Descripción de Carácter: Muy simpática, de charla fácil, con un punto atrevido. Sabe jugar.
Fumadora: No la vi fumar.

CONTACTO
Teléfono: El del local
Web/Anuncio: https://septimocielocordoba.com/m/alma/
Dirección: ...

LUGAR DE ENCUENTRO
Aire Acondicionado/Calefacción: Sí, correcto
Discreción del lugar: Bien, entrada directa sin miradas.
Valoración de las instalaciones: 8/10. Limpio, huele bien, luces cálidas.

SERVICIO
Fecha aproximada de la experiencia: Abril 2025
Tarifa contratada: 80€
Duración real del servicio: 25-30 minutos
Besos: Sí, con lengua, bastante implicados
Mamada(con/sin protección): Sin, muy buena técnica y profunda
Cunnilingus: Sí, se deja hacer
Griego: No lo ofrece
Valoración de la experiencia (0 a 10): 8,5
¿Repetirías?: Sí, me gustó la actitud

Relato del encuentro:
Nada más abrir la puerta, Alma me recibió con un conjunto de lencería negra que le marcaba el coño y unas tetas de escándalo bien encajadas en el sujetador. Tacones altos, mirada caliente, y una sonrisita que ya decía “hoy te vas seco”. Tras dos palabras cruzadas, me empotró contra la cama como si el tiempo le apretara el coño.

Se tiró a mi boca sin miedo, besos con lengua como si fuéramos novios en celo. Me bajó los pantalones y se tragó la polla entera sin compasión. Sin goma, con escupitajos, y metiéndosela hasta el fondo como si llevara hambre de rabo.

Yo no aguanté y le bajé las bragas, le comí el coño como un poseso. Lo tenía depilado y húmedo, y se retorcía como una perra en celo. Luego me la monté a cuatro, y ahí sí que flipé: culo respingón, empotrable, y ella gimiendo como si le debieran dinero.

No hace griego, pero se mueve como si tuviera el demonio dentro. Terminé corriéndome a lo macho, y se quedó tan pancha, con cara de “otro satisfecho más”. No puso prisas, incluso se quedó hablando un rato de buen rollo.